Poesía infantil: Actividad para fomentarla
La poesía es,
probablemente, el género literario más bello e incomprendido de la literatura. Pero
si ya es incomprendida la poesía adulta, no digamos la poesía infantil. Es un
género poco explorado en el conjunto de la LIJ (entendiendo como tal la poesía
escrita expresamente para niños y la ellos mismos han adoptado fuese o no
realizada para ellos).
La poesía es un
género literario de ficción que tiene un origen personal es, también, el más versátil de todos los géneros
pues ofrece oportunidades a múltiples registros pudiendo el poeta dar a su
poema toques heroicos, tintes dramáticos o humorísticos, etc. La lírica es la
poesía por excelencia. Aunque es un
género esencialmente subjetivo también puede dar voz a sentimientos colectivos.
Lo más característico de la poesía es el
ritmo del propio lenguaje pues no es un simple adorno o algo secundario
sino la base sobre la que se construye
el poema (pues solo alcanza su sentido pleno cuando es escuchada en voz
alta).
La poesía se ha
servido de la oralidad como caudal
desde los primeros tiempos, pues, aunque los hombres y mujeres de la antigüedad
eran, en esencia, analfabetos no eran ignorantes y utilizaban la memoria como
herramienta de transmisión cultural. Tras la invención de la imprenta la
transmisión oral siguió teniendo una enorme importancia. En cuanto a la poesía
infantil, fuese o no de tradición oral, seguía encontrándose sometida al
criterio adulto. Por ello, debemos saber que históricamente algunos grandes
autores han trabajado por encargo en
poemas infantiles (Lope de Vega, Góngora, Samaniego, etc.) Sin embargo, desde
el siglo XX empezaron a surgir poetas que se dedicaban exclusivamente a ello
(Gloria Fuertes, Jaime Ferrán, González Estrada, etc.).
La presencia de la poesía infantil en las
aulas
La presencia de
la poesía infantil en las aulas es importantísima pues, aunque tiene unas
singularidades literarias que en un primer momento resulte complejo enfrentarse
a un texto así, también pone al alumno en contacto con un lenguaje especial de
forma oficial. Se matiza lo de “de forma oficial” porque la mayoría de los
niños han tomado contacto con este lenguaje desde su más tierna edad, ya sea
por medio de nanas, trabalenguas, adivinanzas, canciones escenificadas,
oraciones o villancicos, donde el ritmo resulta fundamental y el mensaje se
estructura en versos.
La clave para
que la lectura de poemas en el ámbito escolar se realice generando una
respuesta positiva por parte del alumnado se encuentra en la selección de textos donde se unirán textos conocidos por los chicos, textos escritos por los propios niños, textos escritos expresamente para ellos
y textos escritos para un lector
universal (no diferenciado por su edad).
Desde las aulas
no debemos pretender hacer poetas sino acercar la poesía a pequeños y jóvenes
lectores, el objetivo principal sería lograr que aprecien este género. No podemos
enseñar la poesía, podemos enseñar recursos para facilitar su comprensión, para
transmitir la emoción, la vibración o la conmoción que unos versos pueden hacer
sentir al receptor.
Por ello, a
continuación dejamos una idea para realizar en el aula con el fin de que el
alumnado sienta cierto interés por la poesía, sus recursos, su musicalidad y su
belleza.
TARJETA
CONMEMORATIVA DEL DÍA DE LA POESÍA
En cuanto a
realizar una actividad para el aula que trate de fomentar la poesía se me ha
ocurrido utilizar las técnicas pop-up para tener un resultado vistoso y,
además, disfrutar mientras se realiza la actividad. Para ello vamos a crear una
tarjeta conmemorativa del día de la poesía.
MATERIALES: Consigue un trozo de
cartulina del color que prefieras tamaño A4, tres folios de papel de colores
(también los que prefieras), tijeras, pegamento o celo de doble cara y un
bolígrafo.
PASOS A SEGUIR PARA REALIZAR LAS FLORES
1) Dobla la
cartulina por la mitad.
2) Corta los
folios en mitades.
3) Dobla cada
mitad sobre si misma, posteriormente vuelve a realizar una nueva doblez. Debe
quedar un rectángulo.
4) Lleva una de
las esquinas hacia atrás y, después, dobla la esquina alineándola con el ángulo
(debe quedar como en la imagen). ATENCIÓN: asegúrate de que la esquina que
contiene todos los pliegues es la inferior, dejando la parte de arriba las
partes del papel libre.
5) Recorta en
forma ovalada (cuando llegues a la punta desdobla el pliegue más pequeño para
que los pétalos queden simétricos). El resultado debería ser el siguiente:
6) Corta uno de
los pétalos que tienen un pliegue en el centro.
7) Escribe un
poema (estrofa o verso) sobre la flor. El resultado debería ser el siguiente:
Realiza este
mismo procedimiento dos veces para tener 3 flores.
Una vez tengas
preparadas las tres flores, asegúrate de que los textos están orientados hacia
el mismo sitio y pega las tres flores (una sobre otra) únicamente en el pétalo
central. Hecho esto, pon pegamento en el mismo pétalo para pegarlos a la carta,
asegúrate de no pegarlo muy cerca del pliegue de la tarjeta para que al abrirse
tenga efecto POP-UP.
Si te ha
quedado alguna duda visita es siguiente enlace.
Los poemas
elegidos en la tarjeta que se muestra en las imágenes son los siguientes
(completos):
La plaza tiene
una torre,
la torre tiene
un balcón,
el balcón tiene
una dama,
la dama una
blanca flor.
ha pasado un
caballero
-¡quién sabe por
qué pasó!-
y se ha llevado
la plaza,
con su torre y
su balcón,
con su balcón y
su dama
su dama y su
blanca flor.
(La plaza tiene un torre, Antonio Machado)
Juntáronse los
ratones
para librarse
del gato;
y después de
largo rato
de disputas y
opiniones,
dijeron que
acertarían
en ponerle un
cascabel,
que andando el
gato con él,
librarse mejor
podrían.
Salió un ratón
barbicano,
colilargo,
hociquirromo
y encrespando
el grueso lomo,
dijo al senado
romano,
después de
hablar culto un rato:
- ¿Quién de todos
ha de ser
el que se
atreva a poner
ese cascabel al
gato?
(Los ratones, Lope de Vega)
No a los
juguetes feos.
No,
precisamente en Navidad
que son días de
amor,
que son días de
paz.
Los juguetes
son para jugar a
jugar
(de verdad),
No para jugar a
matar
(de mentira).
Tanto tanto,
tanto tonto,
tanto tanque,
para nada.
Las pistolas
(ni de agua).
El revólver (ni
de broma).
La escopeta (ni
tocarla).
Los juguetes
para todo.
Y las armas
para nada.
¡Niños del
mundo, negaros.
no admitir esos
regalos!
(No a los juguetes feos, Gloria Fuertes)
Comentarios
Publicar un comentario